Historia de la Fábrica de Cal de Coronel Pringles
CAMINO AL 138º ANIVERSARIO
La Calera Eduardo Bonny e hijo, producía cal para puentes y alcantarillas del ferrocarril, y para la venta en general e incluso la misma se utilizó en la construcción de la torre de la iglesia.

Coronel Pringles supo contar con una fábrica de cal, en la cual se producía este producto esencial para la construcción que, no sólo abastecía el mercado interno, sino que también era trasladada a otras localidades de la región. Su propietario era Eduardo Bonny y la misma se denominaba calera "Eduardo Bonny e hijo". Es así que Eduardo, de amplia experiencia en este rubro levantó el horno, en el cual producía hasta 22 toneladas de cal cada tres o cuatro días y un dato a tener en cuenta es que el horno, casi nunca se apagaba, salvo cuando debía realizarse alguna reparación importante. Para fabricar la cal se colocaban capas o camadas de carbón y piedra hasta varios metros de altura, luego ponía debajo de la hornalla suficiente leña como para que tome pronto temperatura y se lo hacía arder durante 36 horas en forma pareja. Si no se hacía de esta manera, se corría con el peligro de que alguna columna quedara a medio coser y en este caso se perdían infinidad de kilos de cal. Trabajaba por ese entonces, allá por el año 1921 junto a su hijo y a otra 5 personas que se dedicaban a juntar la piedra y llevarla al horno donde finalmente eran colocadas en capas sobre el ardiente fuego. Juntaban estas piedras en inmediaciones de la estación Sur. Un dato no menor a tener en cuenta, es que la torre de la iglesia está construída con cal de Pringles y que Bonny fabricó en su momento.
La cal de Bonny era utilizada además para realizar diferentes obras entre las que se destacaban alcantarillas y puentes que el ferrocarril construyó cuando tendía su línea.