La vida de Alejandro Matabone y su familia cambió por completo luego de haber sido víctima de una violenta agresión en la que recibió un golpe en la cabeza con un fierro, provocándole heridas de extrema gravedad. El joven pringlense continúa bajo un complejo proceso de rehabilitación, que demanda controles permanentes y un acompañamiento médico especializado.
El pasado martes, Alejandro volvió a viajar a Bahía Blanca para atenderse con neurocirujanos y continuar los estudios que definirán los próximos pasos en su recuperación. Cada traslado es agotador, y también costoso. Por ese motivo, su esposa, Yamila, se ha convertido en la principal sostén del hogar, lidiando no solo con la incertidumbre y el dolor, sino también con la necesidad de garantizar los tratamientos que Ale hoy necesita para salir adelante. "Por suerte pudimos combatir el virus que había agarrado. Los tratamientos siguen, con médicos y cirujanos. Vamos con la lucha", expresó Yamila, mostrando esperanza a pesar de la dureza del momento.
Actualmente, los traslados a Bahía se realizan en ambulancia, ya que Alejandro no puede permanecer largos períodos sentado o viajando en auto. "Por ahora nos trasladan en ambulancia, porque Ale no puede viajar mucho tiempo sin pausas. Martes y viernes tenemos que volver para ver a los neurocirujanos", detalló.
LA ECONOMÍA FAMILIAR, UN NUEVO DESAFÍO
Sin poder trabajar "?ni ella ni su esposo"? la familia Matabone enfrenta una realidad complicada. Yamila reconoció que están evaluando diversas alternativas para generar ingresos: "Yo no puedo salir a trabajar y Ale tampoco. Queremos empezar un emprendimiento con plantas, semillitas, algo que a él le guste para que pueda distraerse y trabajar", comentó.
También está en marcha una campaña solidaria para juntar ropa en buen estado, con la idea de realizar una feria y recaudar fondos: "Estamos en 47, entre Italia y España. Ahí, quien quiera ayudar puede llevar ropa. Se necesita un poco más para poder hacer la feria", explicó.
Además, no descartan organizar una feria de tortas y otras actividades, pero también necesitan insumos: "Si nos pueden colaborar con harina, huevos, lo que sea para la cocina, sería genial".
La familia cuenta con un patio grande, donde planean armar una quinta pequeña. En este sentido, Yamila también pidió materiales: "Se recibe lo que sea: nylon, media sombra, cenizas"? todo sirve para arrancar".
LA CAUSA JUDICIAL
Sobre el avance del expediente que investiga la agresión sufrida por Alejandro, Yamila indicó: "Nos avisaron que ya está un fiscal nuevo a cargo. Llamaron a declarar al acusado y se negó. La semana que viene tendremos más novedades".
Con paciencia y esperanza, la familia espera que la Justicia avance. "Hay que seguir esperando. Hay que tomárselo con calma"? no queda otra", expresó.
Finalmente, Yamila volvió a agradecer el apoyo recibido desde el primer día. "Desde el minuto uno la gente estuvo ayudándonos. Estoy muy agradecida con todos", dijo con emoción.
La lucha de Alejandro y su familia continúa. Cada aporte, cada acompañamiento, cada gesto solidario suma para sostener el camino de su recuperación. Y en esa lucha, Coronel Pringles está nuevamente unido.