Un nuevo concepto en el cuidado de adultos mayores: Abrió sus puertas el Hotel Asistido en Pringles
Con una propuesta innovadora, el establecimiento combina autonomía, confort y asistencia personalizada. Diego Kees, referente del proyecto, detalló las caracteristicas de este nuevo espacio.

El Hotel Asistido de Coronel Pringles abrió sus puertas hace pocos días con una propuesta innovadora para el cuidado de adultos mayores. Diego Kees, referente del proyecto, compartió detalles sobre las características de este nuevo espacio y su diferencial con respecto a otros establecimientos geriátricos.
"Nosotros tenemos experiencia en este rubro. Hace 15 años que nos dedicamos a la geriatría en Laprida. Y bueno, surgió la posibilidad de venir acá a Pringles a poder desarrollar esto. Y por un intermedio, un conocido que tenemos acá, familia, que tenemos relaciones comerciales, surgió esta posibilidad y vamos a desarrollar lo mismo que hacemos en Laprida", explicó Kees.
A diferencia del establecimiento geriátrico que poseen en Laprida, este nuevo hotel asistido en Coronel Pringles ofrece una mayor autonomía y confort para sus residentes. "En Laprida tenemos más lo que es un establecimiento geriátrico que cumple otro tipo de funciones porque no es tan individual. Son habitaciones compartidas y acá se da la situación de que, como es un hotel, y la idea nuestra es seguir funcionando así, son todas habitaciones individuales con baño privado, lo que te garantiza autonomía en el horario de visitas, en el momento del desayuno y demás, que vos podés elegir qué hacer, si hacerlo en tu habitación, hacerlo en el comedor", detalló.
Uno de los aspectos clave que diferencia a un hogar geriátrico de un hotel asistido es la infraestructura y el nivel de personalización de los servicios. "Nos falta inaugurar lo que era el restaurante, salón de fiestas, que está destinado a las actividades, a reuniones grupales, a que pueda venir la familia a compartir un almuerzo, una cena con su familiar, al festejo de cumpleaños de los abuelos que están internados", comentó Kees.
El proyecto de hotel asistido también se destaca por su equipamiento tecnológico para mejorar la calidad de vida de sus residentes. "Tenemos llamadores de enfermería wifi con botón de ayuda o rescate personalizado. Digamos que, por lo general, en un sanatorio vos tenés el llamador de enfermería al lado de la cama. Nosotros estamos implementando un servicio acá que no solamente tenés el llamador al lado de la cama, sino también podés llevarlo con vos mismo si una persona necesita ayuda, no sea una emergencia, que le ayuden a tomar un café, aprieta el botón y a nosotros nos suenan todos los teléfonos que esa persona está necesitando ayuda de nosotros", explicó.

La puesta en marcha del hotel requirió una inversión significativa, en la que colaboraron tanto los impulsores del proyecto como los propietarios del edificio. "Nosotros teníamos tres destinos posibles. Nuestra idea era hacer un eje de atención que era Olavarría, La Madrid y Pringles, arrancando desde Laprida y bueno, arrancamos con Pringles. Quizás el proyecto después siga para Olavarría también, pero bueno, era algo que nosotros sabíamos. La gente dueña del hotel también colaboró mucho para que nosotros podamos estar acá y bueno, era una inversión que se sabía que se tenía que hacer", señaló Kees.
La transformación del edificio en un espacio adecuado para la estadía prolongada de adultos mayores incluyó diversas modificaciones estructurales. "Un hotel no es una residencia de larga estadía, digamos. Un hotel es una persona que viene, se hospeda y el otro día se va. Acá hay gente que vive todos los días. Los baños tenían bañeras, sacamos todos los baños, hicimos baños adaptados para la tercera edad. A nosotros en particular nos gusta que la persona que se va a bañar y demás siempre esté supervisada por personal nuestro. La medicación nos gusta que la den los enfermeros. Tenemos un director médico. Trabajamos de forma conjunta y eso hizo que se cumplan todas las necesidades, sobre todo en el inicio", destacó.
Además, se realizaron adaptaciones en distintos sectores del establecimiento para facilitar el acceso y la seguridad de los residentes. "Había una casa que era la casa familiar de la gente del hotel. Adaptamos habitaciones para rehabilitación, ambientes de enfermería, consultorio médico. El pasillo que era perdido acá, nosotros lo hicimos como una salida de ambulancia. La ambulancia tiene entrada individual al establecimiento con salida por el patio", agregó.
Finalmente, sobre los costos de estadía en el hotel asistido, Kees explicó que las tarifas varían en función de la habitación elegida y las necesidades del residente. "A nosotros nos gusta manejarnos por habitaciones. Digamos, una habitación que quieran. Acá hay cuatro habitaciones disponibles. Una habitación individual, individual en serio, que era una habitación individual del hotel. Después están las que eran habitaciones dobles, que quedaron habitaciones también individuales. Después hay departamentos de dos ambientes y hay departamentos de tres ambientes. De acuerdo a la necesidad y la complejidad del paciente, nosotros armamos una tarifa", concluyó.
Este nuevo espacio en Coronel Pringles se presenta como una alternativa de calidad para aquellos adultos mayores que buscan un lugar donde residir con independencia, comodidad y asistencia profesional, marcando una diferencia con los modelos tradicionales de geriátricos.



