En el marco de las actividades de la Semana Rosa, Lorena González, concejal del bloque "Juntos", participó de una simbólica escalada al Cerro Tres Picos junto a un grupo de 70 personas, en conmemoración del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama. La experiencia, cargada de emociones, fue una oportunidad para reflexionar sobre la importancia de la prevención, el apoyo y la comunidad.
González comentó que la iniciativa de declarar la Semana Rosa de interés legislativo surgió gracias al trabajo de Joanna Tamagnini y el equipo de salud liderado por Carina Scaglia, quienes han continuado el legado de Norma Fuchs, una referente local en la lucha contra el cáncer. "Norma, a quien cariñosamente llamamos "?Mariposita"?, nos dejó un legado que debemos seguir profundizando. Las mariposas representan la transformación, y su historia es un símbolo de lucha y cambio. Su legado nos enseña a valorar la vida y a honrarla a través de la prevención y el cuidado personal", expresó la edil.
En la semana en nuestra ciudad, en el Hospital Municipal y las salitas Maggi e Yrigoyen, tanto mujeres como hombres pudieron solicitar turnos para realizarse controles gratuitos. González subrayó la importancia de que los varones también participen en estos chequeos: "El cáncer de mama también afecta a los hombres, y es vital que todos tomemos conciencia de la necesidad de realizar controles anuales".
Respecto a la falta de un mamógrafo en la localidad, González admitió que sigue siendo una deuda pendiente, pero destacó el trabajo del área de asistencia social del hospital, que se encarga de gestionar turnos y acompañar a los pacientes en sus tratamientos. "Si bien aún no contamos con un mamógrafo propio, el acompañamiento y la atención médica están siempre presentes en nuestro hospital, y el diagnóstico precoz hace la diferencia", remarcó.
La experiencia de la escalada al Cerro Tres Picos fue especialmente significativa para la concejal, quien fue invitada por una amiga cuya hermana había superado el cáncer de mama. "La escalada fue un proceso que representó el camino de lucha y superación que atraviesan quienes enfrentan esta enfermedad. Mi amiga me contó cómo, dos días antes de recibir el diagnóstico, su hermana escaló el Abra de la Ventana. Esa experiencia le enseñó que, al igual que la montaña, el camino sería difícil, pero no estaría sola", recordó González.
El grupo que inicialmente iba a ser pequeño, creció rápidamente hasta sumar 70 personas, todas comprometidas con la causa de la concientización. "El objetivo no era que uno llegara solo, sino que llegáramos todos juntos. Fue una experiencia muy movilizante. Vimos cómo personas que escalaban por otros motivos se unían a nuestro grupo al conocer nuestra causa", agregó emocionada.
La concejal finalizó con una reflexión esperanzadora: "Es un mensaje de vida, de apoyo mutuo y de no perder de vista que siempre hay alguien dispuesto a acompañarnos. Escalar ese cerro fue un símbolo de lucha y esperanza para todas nosotras, y esperamos que el próximo año podamos organizarlo, porque mucha gente se quedó afuera".