La semilla de esta historia se plantó cuando Félix, tras finalizar sus estudios en Bahía Blanca, se enamoró del Club Leandro N. Alem. Al regresar a su tierra natal, Coronel Pringles, no dudó en materializar su sueño de crear una entidad deportiva. Inspirado por su lealtad al club de Bahía Blanca, eligió el nombre "Alem" y reunió a un grupo de amigos de su juventud para formar la primera comisión directiva.
Un puñado de jóvenes, con Félix Figliuolo como presidente, marcó el comienzo de una historia que perdura hasta el día de hoy. Inicialmente, la sede del club era modesta, ubicada en la esquina de Garay y Dorrego. En un gesto de apertura hacia la comunidad, la cuota de membresía mensual era de 20 centavos para adultos y 10 centavos para los jóvenes.
El año 1918 marcó el debut oficial del equipo de fútbol del Alem, que viajó a Coronel Suárez para enfrentar a Blanco y Negro de esa ciudad. El empate 1-1 fue un auspicioso comienzo para el club. A lo largo de los años, Alem participó en emocionantes encuentros con destacados clubes como Alumni, Azul Atlético, Racing, Estudiantes de Olavarría, Olimpo, Dubling, Independiente, Ferroviario, Blanco y Negro, Deportivo Sarmiento, Jorge Newbery y Lilán. En cada competencia, Alem dejaba su huella, ya fuera en la victoria o en la derrota.
Una característica especial del Club Atlético Alem fue su inclusión temprana de mujeres en todas sus actividades deportivas. Nombres como Adelina Arrascaete, la primera presidenta de la comisión de señoritas, destacan el papel fundamental de las mujeres en el desarrollo de las distintas disciplinas del club.
El 10 de abril de 1923, un hito importante tuvo lugar cuando el Municipio cedió una parcela de tierra para que el club construyera su campo de deportes. La inauguración oficial tuvo lugar el 10 de diciembre de 1923, marcando el comienzo de romerías populares y eventos deportivos exitosos.
A lo largo de los años, el Club Alem diversificó sus actividades deportivas, incluyendo boxeo y pelota a paleta. En 1927, se inauguró un ring de boxeo, y en 1928, la cancha de pelota a paleta. Además, en 1952, se colocó la piedra fundamental de la actual sede social, que se inauguró en 1955.
El básquetbol también se convirtió en una parte integral del club, con equipos tanto masculinos como femeninos. Los nombres de los jugadores y jugadoras que representaron al Alem en las canchas, son parte de su rica historia.
En la década de 1970, el club dio un paso importante al establecer el DEFCA, una organización dedicada a la educación física y proyectos deportivos en la ciudad.
Hoy en día, el Club Atlético Alem ha crecido considerablemente y cuenta con un complejo de instalaciones de tenis y fútbol a la entrada de la ciudad. A lo largo de su historia, muchas personas han contribuido al éxito y crecimiento de esta querida institución, manteniendo viva la llama del Club Atlético Alem en el corazón de los pringlenses. Nombres como Félix Figliuolo, José Rojo, Pedro Rossi, Luis M. Subijana, Telésforo Subijana, César H. Mammini y el recordado Ricardo Petón, han dejado una huella imborrable en esta entidad, donde cada comisión y miembro ha trabajado incansablemente para llevar adelante el espíritu celeste de nuestra ciudad.